El día de ayer una inspectora y un inspector fueron agredidos mientras realizaban un control vehicular.
Anoche una inspectora de tránsito de Saladillo sufrió una situación de violencia, junto a un compañero de trabajo, y hoy expuso lo sucedido denunciando la falta de accionar de la policía local, ante el llamado de asistencia.
Según lo dicho por la agente Sandra Negrete, «en el día de ayer en un procedimiento de trabajo en calle Rivadavia y Moreno, siendo las 21:30 horas se recibe por handy un pedido de policía para que tránsito se acerque al lugar, ya que había un camión mal estacionado, y en consecuencia interrumpía la circulación vehicular. Se acerca un móvil y se visualiza que dicho camión se encontraba en el lugar y se solicita a su chofer que cese con respectiva falta».
«En el intercambio de diálogo se puede observar que dicho conductor hablaba con verborragia y aliento etílico. Para seguir con el procedimiento solicito al 101 un móvil policial de apoyo, ya que cuando llegamos al lugar había un móvil, que minutos más tarde se retira retrocediendo hasta calle Sojo, abandonando el lugar», agregó.
Negrete indicó que debido a las características del conductor, se solicita realizarle el test de alcoholemia, y este se niega en forma violenta.
«Comienzo a realizar el acta de infracción, sufriendo empujones, insultos, un golpe en la cabeza con un celular que intentaba filmarme la cara, pero sigo realizando mi trabajo. Una vez finalizada el acta solicito que el conductor la firme y cuando nos estábamos retirando del lugar con mi compañero de móvil, recibo un empujón de un masculino vestido con sweater color blanco, y luego agarra a golpes de puños a mi compañero. De inmediato se suman a golpearlo el acompañante del conductor y el conductor del camión, dando golpes de puño y empujando a mi compañero arriba de un vehículo que había quedado estancado, golpeando éste con su cabeza el parabrisas y rompiendo el mismo. De allí más golpes y empujones a mis tres compañeros, siendo uno de ellos el más afectado», detalló.
La inspectora denunció que la policía nunca llegó, «de manera que sufrimos el abandono y la total falencia de compromiso en la función y deberes policiales».
A su vez aclaró que «no todos los efectivos policiales actúan de la misma manera, ya que otros han cumplido con sus obligaciones en el momento que se solicita colaboración».
Negrete indicó que «El punto importante y a destacar es este abandono, exposición y falta de respaldo. Se podía haber evitado esta violencia, ya que nosotros como inspectores de seguridad vial realizábamos nuestro trabajo». «Y más allá de querer exponer lo sucedido, quiero que sepan que los inspectores de tránsito también somos padres, madres, hijos, hermanos y pareja de alguien, quienes esperan que lleguemos a nuestros hogares, porque la labor no es fácil, ya que es muy criticada. No se ve muchas veces y no se valora nuestro trabajo. Tristemente muchas veces somos pisoteados e insultados por el solo hecho de realizar nuestro trabajo de constatación de faltas. Quiero agradecer a las personas que nos brindaron su apoyo», finalizó.