Por el alto nivel de confinados, los contactos estrechos sin síntomas no harán cuarentena. Kreplak había dicho que la mitad del equipo de vacunación estaba aislado, con el esquema de vacunación completo y asintomático.
El personal de Salud que sea contacto estrecho, no presente síntomas y tenga el esquema de vacunación completo queda exceptuado del aislamiento (Foto EFE/JUAN IGNACIO RONCORONI)
El gobierno de la provincia de Buenos Aires, a través del ministerio de Salud bonaerense, definió revisar las “Pautas de cuarentena de contactos en personal de salud” y a partir de ahora el personal de salud de la provincia que sea considerado un contacto estrecho -en personal de salud se establece contacto estrecho en contexto de trabajo- estará exceptuado de hacer la cuarentena en el caso de que no presente síntomas y tenga el esquema de vacunación completo y también quiénes se han recuperado de un episodio de COVID-19 confirmado por laboratorio y que presentan una nueva exposición al virus, dentro de los tres meses del episodio inicial; siempre con vacunación completa.
Producto del alto nivel de contagiosidad que presenta la variante Ómicron, el aislamiento en el personal de salud por ser contacto estrecho y no presentar síntomas se está volviendo un problema para el desarrollo de ciertas prácticas. El ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, había adelantado que el tema estaba en discusión y lo graficaba con la siguiente frase: “estamos vacunando a velocidad récord, pero con la mitad del equipo porque la otra mitad está aislada”.
Este lunes se conoció la publicación en el Boletín Oficial de la provincia que establece los cambios y define otras pautas a aplicarse al personal de Salud. En la resolución que lleva la firma del funcionario de la gestión de Axel Kicillof, se advierte también que “el personal exceptuado de la cuarentena, continuará con la actividad laboral, con estricto uso de los equipos de protección personal (EPP) y automonitoreo de síntomas con control de temperatura dos veces por día”.
Además, se aclara que “se considerará la realización de pruebas diagnósticas entre el 3er y 5to días desde la última exposición al personal de salud exceptuado de la cuarentena contacto estrecho de un caso confirmado de COVID-19 conviviente”.
Además, se definió que el personal de salud que haya tenido contacto con un caso confirmado de COVID-19 con uso adecuado de los equipos de protección personal o que no cumple los criterios de contacto estrecho, se considerará “un personal expuesto con bajo riesgo y continuará con la actividad laboral, con estricto uso de los EPP y automonitoreo de síntomas con control de temperatura dos veces por día”.
Los cambios de protocolos para contactos estrechos en casos asintomáticos que tengan el esquema de vacunación completo en lo que hace al personal estratégico es un debate que por estas horas se da entre autoridades del gobierno nacional y las distintas provincias.
Desde el ministerio de Salud bonaerense remarcaron que la medida coincide con la decisión que se tomó en otros países que atraviesan una coyuntura similar debido al carácter crítico del personal de salud para el sostenimiento de los servicios de atención en períodos de alta demanda. También se remarcó que la decisión “es posible gracias al notable avance de la Campaña Buenos Aires Vacunate en la Provincia, donde ya se vacunaron 560.642 trabajadores/as de la salud, el 97 por ciento completó su esquema primario y el 50 por ciento ya recibió su dosis de refuerzo”.
“Hoy un problema muy grande que tenemos, sin dudas, es que hay mucha gente aislada y muchas veces tienen trabajos delicados. Si eso lo llevamos a un punto más extremo nos faltan cirujanos para hacer las cirugías, terapistas, que en verdad están en su casa porque son contacto estrecho, que tienen tres dosis, que muchos de ellos no tendrán más que un dolor de garganta de unas horas”, remarcaba Kreplak, quien aclaró que la persona que está contagiado “no va a trabajar”, sea o no personal de salud.
Incluso, la Ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, expresó este domingo que “la mayor amenaza para el sistema sanitario” no es que “se sature” con hospitalizaciones, sino que “no haya médicos, médicas, enfermeros y terapistas para poder dar respuesta”.
“Estamos analizando permanentemente si es necesario, y si es posible, seguir disminuyendo el aislamiento en el personal estratégico, siempre mirando la seguridad y evidencia que genera esta medida”, sostuvo Vizzotti en diálogo con CNN Radio. “Con una variante muy leve, una población de vacunada en un gran porcentaje y sus refuerzos, y un riesgo muy bajo de transmisión intra laboral, la posibilidad (de reducir) es segura. Esta semana lo seguiremos analizando”, manifestó la titular de la cartera de Salud.
Este lunes, el médico intensivista Arnaldo Dubin también se refirió a este escenario de contagios y contactos estrechos sin síntomas en el personal de salud. “Hay una sobrecarga de trabajo y una fatiga de parte de los médicos. Nuestros compañeros de terapia intensiva están agotados y pensando en abandonar la especialidad, por cuanto el sistema no nos da respuesta. Tenemos serias dificultades para mantener los planteles activos, un gran número está contagiado o es contacto estrecho”, remarcó el profesional de la salud en declaraciones a Radio Provincia.
El aislamiento por contacto estrecho o propiamente por el contagio también está empezando a afectar otras actividades, además de la atención en Salud. Por caso, la empresa Aerolíneas Argentinas debió reprogramar 6 vuelos en lo que va del día y anunció que tiene 1200 empleados en aislamiento.
Hasta la tarde se este lunes se llevaban aplicadas en el país un total de 79.722.026 dosis, de las cuales 38.643.318 personas alcanzadas por la primera dosis, 33.500.647 personas se dieron ambas dosis, 2.785.364 con dosis adicional y 4.792.697 de personas ya recibieron la dosis de refuerzo.