Algunos ciudadanos elegirán emitir su voto en blanco como expresión de su descontento ante los candidatos que se presentan. No obstante, esta situación difiere de las PASO. En esta nota, les contamos a quién beneficia esto.
Aquellos ciudadanos que este domingo elijan votar en blanco en la Elecciones Generales como manera de descontento, influirán en los resultados.
Según la Cámara Electoral el voto en blanco es válido pero no afirmativo y no se incorpora en el cómputo final, ya que la ley establece que una fórmula será declarada ganadora en primera vuelta si obtiene más del 45% de los votos afirmativos válidamente emitidos.
Además, un candidato será proclamado Presidente si alcanza al menos el 40% de los votos afirmativos válidos y mantiene una ventaja de al menos diez puntos porcentuales sobre la fórmula que le sigue en número de votos.
Esto marca una hay diferencia con las PASO donde las listas deben superar un umbral del 1,5% de los votos válidos emitidos, que engloban tanto los votos afirmativos como los votos en blanco. En tanto que en las elecciones generales, el universo se reduce: sólo se tienen en cuenta los votos afirmativos, excluyendo los votos en blanco del recuento.
Al omitir los votos en blanco en las elecciones generales, una coalición o agrupación tiene una mayor probabilidad de alcanzar el umbral del 40% o 45% necesario para ganar en la primera vuelta, en comparación consigo se consideraran todos los votos válidos. Esto implica que, con la misma cantidad de votos, un frente obtiene un porcentaje mayor en las elecciones generales que en las PASO.