Fue en Kuwait. Tras dar el «sí, quiero», su marido la ridiculizó delante de todos los invitados y decidió dar marcha atrás con la boda.
Cuando la mujer se estaba retirando de la ceremonia, se cayó delante de todos y su pareja le gritó «Estúpida», mientras se reía. Sin ni siquiera llegar a salir del registro civil, la joven se levantó y le pidió al juez de paz que disolviera el matrimonio de manera automática. Apenas habían pasado 180 segundos del «Sí».
¿Vos qué hubieras hecho?